¿CÓMO SE CAMBIA CON EMDR?

Los mecanismos de EMDR

Una de las discusiones sobre la terapia EMDR es saber qué es lo que realmente funciona, o cuáles son los mecanismos a través de los cuales ocurre un cambio, particularmente en las personas con traumas, aunque también ha funcionado en personas que no han sufrido de traumas severos, sino que han experimentado eventos negativos o perturbadores que actualmente influyen en su comportamiento.

El protocolo de la terapia EMDR es un paquete de procedimientos que se aplica de forma sistemática a los consultantes. El procedimiento completo implica la toma de la historia pasada, de los síntomas actuales y de las expectativas que la persona tiene para manejar en el futuro dichos síntomas. Incluye esta parte también los “disparadores” o eventos que, como su nombre lo indica, desencadenan o disparan los síntomas actuales. En esta primera fase se determina si el paciente es “apto” para la intervención con terapia EMDR, considerando que consultantes muy desregulados o con síntomas disociativos, bien sea actuales o crónicos, requieren una etapa de preparación en la cual se les da herramientas que les permite enfrentar mejor los recuerdos traumáticos o perturbadores.

La siguiente fase comprende un conjunto de técnicas que se aplican sucesiva o paralelamente dirigidas a manejar las cogniciones negativas y positivas (las creencias básicas), los sentimientos, las emociones y las sensaciones somáticas, a través de las cuales el consultante entra a la “memoria” traumática. Posteriormente, con todos estos elementos identificados por el consultante, se inicia la estimulación bilateral que puede ser táctil, visual o auditiva.

terapia EMDR

Al finalizar la terapia el consultante aún recuerda el evento, pero la emoción asociada al evento cambia dramáticamente. No es posible, para un ser humano, recordar una experiencia negativa, en muchos casos abrumadora por su contenido, y no experimentar algo de malestar, fastidio o impresión negativa. Lo que muchos consultantes reportan es que el recuerdo deja de tener el “poder” de producir un gran malestar. Paralelamente ocurren unos cambios a nivel cognitivo importantes. Reportes de “ya no siento tanta rabia por esa persona”, “ahora puedo pensar que le siento lástima”, o “fue un suceso muy desafortunado de mi vida, pero está atrás” son comunes.
El tema en discusión ha sido si la estimulación bilateral juega algún papel en estos procedimientos y si lo hace porqué lo hace y cómo lo hace. Inicialmente los estudios que investigaron el componente de estimulación bilateral concluyeron que no había diferencias significativas entre los consultantes que se les administraba la estimulación bilateral y los que no.

Hasta principios del 2000 fue un tema “oscuro” para EMDR. Un hallazgo fortuito, como fue el de la Dra. Shapiro, ¿cómo podría llevar a cambios tan importantes en una persona? Es más, con una terapia relativamente rápida. Las dudas estaban por todas partes con sobrada razón. Resultaba un poco “taquillero” tanta belleza……Sin embargo la forma de darle estatus científico es lograr mirarlo con los ojos de la ciencia. Seguir sus lineamientos y acogerse a los principios éticos que le permitan conseguir ese estatus.

Si la ciencia ha mostrado resultados…..si la ciencia nos acerca a ciertas «verdades»…¿por qué no acudir a la ciencia?

Desde esa época hasta hoy el número de investigaciones reportadas en artículos científicos ha aumentado enormemente. La investigación está demostrando que efectivamente la estimulación bilateral sí juega un papel diferenciador en el protocolo de intervención EMDR y es una condición necesaria para este tratamiento. Estos resultados han estado acompañados de varias hipótesis entre las que se encuentran tres: el papel de la memoria de trabajo, el efecto de la consolidación de la memoria durante el sueño REM y la recuperación de la memoria por comunicación inter-hemisférica.

Superando los obstáculos

Mi impresión personal, como clínica, es que el protocolo de la terapia EMDR comprende muchos componentes activos. Desde la actitud del terapeuta, con un enfoque de terapia centrada en el cliente, pasando por el “mapa” del modelo SPIA en donde el consultante tiene la oportunidad de visualizar un esquema de sus problemas conectando pasado, presente y futuro, el énfasis durante todo el procedimiento en que el consultante mantenga una atención “dual”, observando el pasado y sus recuerdos y teniendo conciencia del aquí y el ahora, del presente, hasta el mecanismo más elemental de la estimulación bilateral, hace parte fundamental de los cambios que produce la terapia.
Determinar el peso que tienen los diferentes componentes de la terapia EMDR e identificar los mecanismos de acción no es tarea fácil. Es indudable que allí hay que llegar y desde el punto de vista clínico es claro que los resultados son positivos. La investigación ha sido lenta pero cada día aumenta con resultados satisfactorios en cuanto a determinar los verdaderos efectos de esta terapia. Si la ciencia ha mostrado resultados……si la ciencia nos acerca a ciertas “verdades”…… ¿porque no acudir a la ciencia?

REFERENCIAS

Lee, C.W. & Cuijpers, P. (2013). A metaanalysis of the contribution of eye movements in processing emotional memories. Journal of Behavior Therapy and Experimental Psychiatry, 44, 231–239.

De Jongh, A., Ernst, R., Marques, L. & Hornsveld, H. (2013). The impact of eye movements and tones on disturbing memories of patients with PTSD and other mental disorders. Journal of Behavior Therapy and Experimental Psychiatry, 44, 447–483.

Shapiro, F. (2001). Eye movement desensitization and reprocessing: Basic principles, protocols and procedures (2nd edn). New York: Guilford Press